Enviado por: Carlos Garcia
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| Foto de archivo |
Estamos oyendo continuamente, de manera persistente, la frase
preconcebida para la guerra psicológica: “para qué denunciar si los gobernantes, las
autoridades no hacen nada y se dedican a pasar el dato de cualquier denunciante
a los malandros, a los delincuentes, a los paracos, a los contrabandistas, a
los comerciantes acaparadores, usureros y ladrones, a las mafias encarecedoras
de los alimentos y productos del hogar.”
Y encontramos que el mecanismo
nacido de los laboratorios de guerra de la derecha y del imperialismo, les
viene dando resultados positivos, pues logran
disociar a las personas de la realidad real y lanzarlas a la realidad
virtual, falsa y engañosa. Con el mecanismo, meten miedo en el pueblo, pues
agregan el cuento que los delincuentes asesinan a los denunciantes porque la policía, la Guardia Nacional, los agentes
del CICPC y otros cuerpos de seguridad del estado venden la información del
denunciante, de los robos.
La gente oye historias, unas reales, otras inventadas, de las
andanzas de los sicarios, de los asesinatos a mansalva, de las agresiones, de
los atracos, contadas al estilo de los intereses de la derecha, desde las
cuales esconden sus intenciones y sus acciones y mantienen al pueblo callado
frente a sus desmanes.
Utilizan las guerras entre pandillas delincuenciales, entre
grupos paramilitares, entre bandas de narcotraficantes, como elementos para
mantener en jaque a la gente y esconder el papel de las mafias confundidas con
grupos políticos de la derecha, el papel de contrabandistas de alimentos,
gasolina, gas, aceite, materiales de construcción, alimentos animales, abonos
agrícolas. Etc. y por supuesto el trabajo de acaparamiento, alza de precios,
usura y latrocinio.
Si nadie denuncia ni a la delincuencia organizada, ni a los
delincuentes de cuello blanco, ni a los pandilleros incrustados en entes
gubernamentales, la acción nefasta de la desconfianza creada a través del miedo
y la guerra psicológica se hace universal y puede terminar en una explosión
social, en derrocamiento del gobierno y en la vuelta a la cuarta república,
además produce y va a producir enormes beneficios económicos a las mafias, a la
oligarquía explotadora, antipatria y proimperialista.
Sabemos que hay agentes de la Policía, elementos de la
Guardia Nacional, agentes del CICPC, policía de tránsito, funcionarios del
Seniat, Indepabis, etc. que traicionan al pueblo y participan de la corrupción,
vendiéndose por un plato de lentejas a las mafias oligárquicas que los
corrompen, pero no son los cuerpos completos, ni la mayoría de los efectivos.
No podemos, como pueblo organizado, seguir permitiendo que
nos manipulen por miedo, que nos creen mayor desconfianza en las autoridades y
nos lleven al abismo de la guerra y la violencia.
Si todo el pueblo, en
estrecha relación con el gobierno, en todas sus instancias, actúa unido y
organizado en el combate a la violencia, por la paz y la vida, desacatando las
maniobras de quienes nos quieren sordos, ciegos y mudos, para que no combatamos
la bastardía de sus intereses mezquinos y
antipopulares, estaremos ganando la batalla de la seguridad, de la
justicia y de la libertad, estaremos ejerciendo el poder popular.
Publicado por: Yadira Gonzalez
Comunicadora popular
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