Gobernador reitera que hay
paramilitares infiltrados en Táchira
San Cristóbal, 18 de febrero de 2014 (Prensa ORIC).- El
gobernador del Táchira, José Gregorio Vielma Mora, anunció el despliegue de un
operativo especial para proteger edificios públicos, locales comerciales,
hospitales y demás recintos de servicio público a la colectividad.
“Hemos
desplegado a la Guardia Nacional Bolivariana en protección y custodia de los
entes gubernamentales, así como de los centros comerciales, farmacias,
hospitales y clínicas a fin de evitar cualquier daño o ataque contra los
mismos”, apuntó.
Advirtió
que grupos violentos impiden el acceso hacia el Hospital Militar en
Paramillo, manteniendo incomunicados a los habitantes de esta zona
de la ciudad y reiteró que existen paramilitares infiltrados en las protestas.
“Familias
residentes en los sectores de La Cueva del Oso y Paramillo tienen prácticamente
nueve días sin salir de sus casas, es una situación delicada donde están
afectados muchos niños y ancianos”.
Llamó
nuevamente a los líderes de estos grupos opositores a que restablezcan el paso
por la Universidad Experimental del Táchira y Paramillo a fin de que estas
familias puedan transitar libremente, adquirir alimentos y recibir atención
médica.
Agresiones al transporte público
Informó
el Gobernador sobre la reunión que sostuvo con directivos de los sindicatos de
transporte de San Cristóbal, Cárdenas y de municipios aledaños con el fin de
normalizar este vital servicio.
“Existe
un grupo de motorizados del Club TX, el cual está amenazando en actitud
terrorista a los conductores, obligándolos a que no salgan a la calle a
trabajar, ingresan a las busetas para bajarlos y le han destrozado los vidrios
frontales y laterales a algunas unidades”.
Dijo
que son entre 310 y 500 motorizados los que están causando zozobra en el
colectivo, ya que portan armas largas y cortas, no tienen placas en sus motos y
actúan de manera agresiva y violenta.
“Intentaron
entrar al Instituto Universitario Tecnológico y no pudieron, se fueron al
terminal de pasajeros. Amenazan a los comercios y a los restaurantes para que
no abran sus locales”.
Manifestó
que estas acciones lideradas por el alcalde de San Cristóbal, Daniel Ceballos,
afectan directamente a los empresarios que le dieron los votos en los comicios
municipales de diciembre pasado.
Agregó
que los transportistas le han manifestado su preocupación, ya que tienen
prácticamente tres días sin trabajar y sin percibir ingresos necesarios para
cubrir créditos bancarios, pago de
seguros y el sustento familiar.
Indicó
que atendiendo el llamado de las familias residentes en la parte alta de la
ciudad, han procedido en horas de la madrugada a la limpieza de escombros,
barricadas y basura que dejan de manera irresponsable este grupo de
manifestantes.
Ciudad en guerra
“San
Cristóbal se ha convertido en una ciudad en guerra, incitando a
enfrentamientos entre grupos de la
oposición y el oficialismo y los motorizados del Club TX sembrando terror, prohibiendo
la circulación a los conductores, impidiendo la salida de basura de hospitales
y clínicas e incluso amenazando con atacar emisoras de radio privadas”,
comentó.
Señaló
que los diputados opositores del Consejo Legislativo Estadal piden ahora una
mesa de diálogo, después de propiciar estos hechos violentos.
“Estos
diputados ya reconocieron que las protestas violentas se le fueron de la mano
por la participación y financiamiento de contrabandistas, y paracos. Un joven
que resultó herido cerca de la Unet denunció por el canal Telesur que en esta
casa de estudios hay armas AK-47, armas largas y cortas y un gasto excesivo en
comidas y bebidas alcohólicas”.
A
pesar de esta situación, sostuvo el Gobernador, las autoridades han sido muy
tolerantes y en ningún momento se ha violentado la autonomía universitaria.
Calificó
el mandatario estadal estas manifestaciones como actos violentos y protestas
absurdas que no resuelven en nada la situación del país.
Mencionó
que en algunos sectores como Las Vegas de Táriba y Zorca, las personas no sólo
queman basura y cauchos, sino que cobran un “peaje”, para dejar circular los
vehículos por un lado de la calle.
“Cobran
entre 200 y 300 bolívares para que las personas puedan movilizarse por algún
costado de la calle, son personas que están encapuchadas y acompañadas de
motorizados”.
Denunció
que una familia de apellido Vielma, fue atacada por un grupo de estas personas
que trató de ingresar a su vivienda “creyendo que eran familiares míos y los
grababan con cámaras, amenazándolos e intimidándolos con actitud violenta”.
Puntualizó
que no permitirá este tipo de intimidaciones ni ataques a viviendas, sean a
personas afectas al oficialismo, ni que pertenezcan a la oposición.
Felicitó
la labor de la Guardia Nacional Bolivariana y de los demás componentes de
seguridad, los cuales se ha comportado a la altura ya que no han agredido a
ningún ciudadano en el Táchira.
Sostuvo
que además de ello, la Guardia Nacional limpia cada día la ciudad, tras las
barricadas de basura impuestas por los grupos violentos en diferentes calles y
avenidas.
“Es
loable la hidalguía de nuestros funcionarios quienes están al servicio del
pueblo noble del Táchira, resguardando la integridad física de los habitantes y
no cayendo en las provocaciones de los manifestantes”.
Recomendó
a los tachirenses organizar una marcha para agradecer la labor de los cuerpos
de seguridad y para rechazar el delito del contrabando que afecta a la
población.
Formuló
un llamado a la tranquilidad, a la concordia y a deponer el desbordamiento de
la violencia y el terror en perjuicio de los ciudadanos.
Alcaldía debe recoger la basura
Vielma
Mora recordó que la responsabilidad de la recolección de los desechos sólidos
es de las alcaldías, por lo que instó al burgomaestre Daniel Ceballos, a mantener
limpio el municipio San Cristóbal.
Mencionó
que la Gobernación apoya en las jornadas diarias y traslada la basura
recolectada al vertedero ubicado en la zona Norte del Táchira, la cual maneja
la Mancomunidad Manorta.
Plan preconcebido
El
mandatario regional anunció que el plan de golpe de estado que quiere imponer
la derecha en el país, inició en Táchira los primeros días de febrero, con el
incendio del vertedero de Torbes, justo cuando finalizó la Feria de San Sebastián.
“A
partir de allí se generó una escalda de violencia desde el cinco de febrero por
una supuesta violación a una estudiante de la Ula, hecho que nunca fue
reportado ni denunciado y que generó esta situación que se vive en la entidad”,
sentenció. FIN/ Magaly Gutiérrez-Daniel Suárez. Fotos: Gabriel
Barrero.
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