La Franja de Gaza se enfrenta a una crisis humanitaria cada
vez más grave, con niños pereciendo a causa de la desnutrición en medio del
control de Israel sobre la ayuda humanitaria. La política de hambruna
deliberada implementada por el régimen israelí ha exacerbado la escasez de
alimentos, llevando a muertes prematuras y crueles entre los más vulnerables.
Heba Ziyada, una bebé palestina, fue una de las víctimas más
recientes de esta tragedia. Su desgarrador fallecimiento debido a la
desnutrición y la deshidratación en el Hospital Kamal Adwan en el norte de Gaza
refleja el impacto devastador de la falta de acceso a alimentos básicos. Su
historia se suma a la de Anhar Saqr al-Shanbari, otra niña de Beit Hanun, cuya
vida también fue arrebatada por el hambre.
Imágenes compartidas en redes sociales muestran la
transformación alarmante de estos niños, quienes pasaron de brillar con salud a
sufrir una profunda decadencia física. La situación se agrava por la falta de
tratamiento médico adecuado, como en el caso de Yazan al-Kafarna, un niño de 9
años con parálisis cerebral cuya salud se deterioró debido a la escasez de
alimentos y oxígeno durante la guerra.
El bloqueo impuesto por Israel ha impedido la entrada de
ayuda humanitaria a Gaza, utilizando el hambre como arma de guerra. Incluso se
han bombardeado reuniones de palestinos que esperaban recibir ayuda. Este
bloqueo ha dejado a más de dos millones de personas sin hogar y desplazadas,
luchando por sobrevivir en condiciones extremadamente precarias.
El impacto en los niños es especialmente devastador.
Informes del Ministerio de Salud de Gaza revelan que más de 20 niños han muerto
por desnutrición en el norte de Gaza, una cifra que podría ser mucho mayor
debido a la falta de registro de muchas muertes. Los exámenes de desnutrición
realizados por organizaciones internacionales muestran un aumento alarmante en
los casos de desnutrición aguda, con un 90% de los niños menores de 2 años
enfrentando una pobreza alimentaria grave.
El director ejecutivo del Programa de Emergencias Sanitarias
de la OMS advierte que el hambre y las enfermedades constituyen una
"combinación mortal", mientras que representantes en la ONU describen
la situación en Gaza como un "dilema angustiante" entre morir en
bombardeos o enfrentar una muerte agonizante por inanición.
La comunidad internacional enfrenta un llamado urgente a la
acción para poner fin a esta crisis humanitaria y garantizar el acceso
inmediato y sin restricciones a la ayuda humanitaria en Gaza. La vida de miles
de niños y civiles inocentes depende de ello.
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